Las aves tienen la ventaja de tener una especie de magnetrómetro natural. Tras un estudio y un experimento hecho por unos científicos alemanes, se ha descubierto que casi todas las aves tienen en la parte superior del pico miles de depósitos de hierro en las terminales nerviosas, que son los que funcionan como si fuesen un magnétrometro al alinearse con los polos magnéticos de la Tierra.

Por lo que podemos decir que las aven van formando una especie de mapa de orientaciones magnéticas, que posiblemente guardan memorizando en forma de secuencia y recuerdan en secuencia inversa, de manera que pueden volver al punto de partida sin ningún problema.
ROCIO, QUE CHULO TU BLOG! =D. Ahora tengo que irme para Coín, después te agrego a favoritos vale? =).
ResponderEliminarUn besazo, espero que sigas así! =)
Muchas gracias Juan!!! Voy a intentar seguir mejorandolo!!
ResponderEliminar¡Muy buena entrada! ¡Que curioso no lo sabía!
ResponderEliminar